Después de un largo y provechoso fin de semana en Madrid, os dejo algunas de las impresiones que me causó la Vogue Fashion's Night Out española que se celebró este jueves.
La primera tienda a la que me acerqué fue Hugo Boss, en Ortega y Gasset, en la que cuando el dj aún estaba preparando su mesa ya había una larga cola sedienta de bebida gratuita y demasiada gente que entorpecía poder contemplar o comprar cualquier cosa. Después de pasar el abarrotado epicentro entre Ortega y Gasset y Serrano donde estaba el photocall y el Espacio Vogue, nos acercamos a la tienda Miu Miu, un poco más alejada del meollo, donde pudimos beber cava y cerveza mientras contemplabamos sus zuecos inaccesibles y escuchabamos la música que pincharon unas dj's guapísimas.
Tienda Miu Miu
Fuimos bajando hasta Hakei, donde sus caipirinhas también provocaron colas interminables, pero la tienda se dejaba visitar, de hecho fue la única tienda donde vi gente comprar. Como aún no me dolían demasiado los pies fuimos bajando por la calle Lagasca donde pasamos por Amaya Arzuaga, que ofreció barra libre de gin-tonics y la posibilidad de conocer su nueva colección llena de vestidos futuristas y volúmenes geométricos. Y ya en Jorge Juan, otra calle repleta de gente, pasé por el Ganso y Karen Millen donde estaban las famosísimas it-girls y bloggers Miranda Makaroff y Gala González poniendo música y animando el ambiente.
Tienda Amaya Arzuaga
En definitiva, fue una noche llena de vida, movimiento, moda, bebida y muchos muchos tacones altos, y aunque el propósito de este macroevento es el consumo y yo de eso vi muy poco, por una noche las calles se inundaron de gente con interés por la moda, sus diseñadores, sus marcas..., y aunque acabé destrozada, eso siempre es motivo de celebración!
Gala y Miranda en Karen Millen
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